El proyecto tiene como objetivo impulsar un proceso de ciencia ciudadana e innovación social para conocer y entender los niveles de exposición a las partículas de desgaste de los neumáticos y su potencial impacto en la salud humana con un enfoque de salud planetaria, trabajando con población general – y con especial atención en jóvenes – en un entorno urbano.
Por medio de la ciencia ciudadana y la innovación social CIRCULATE busca visibilizar una problemática de importancia creciente y muy poco explorada: las partículas de desgaste de los neumáticos.
El proyecto involucra a jóvenes de dos institutos de Barcelona (Bernat el Ferrer- Molins de Rei y Barres i Ones- Badalona) en el diseño y desarrollo de un estudio científico que busca medir los niveles de exposición a los contaminantes de los neumáticos e investigar cuáles podrían ser los efectos para nuestra salud. Para posteriormente en la fase de Prototipado colaborativo, explorar soluciones centradas en la co-creación de una intervención divulgativa y participativa que ayuden a dar a conocer esta problemática, promoviendo el diálogo y reflexión en torno a los modelos de movilidad y la contaminación.
¿Sabías que los neumáticos son una fuente importante de contaminación ambiental? ¿Qué tan expuestos estamos los humanos a las partículas de desgaste de los neumáticos?
Las partículas de desgaste de los neumáticos (PDPs) incluyen tanto material particulado de diversas medidas como numerosos aditivos del caucho del propio neumático (ACPs). Estos aditivos se han empezado a considerar como una fuente importante de contaminación ambiental, incluso más potentes que aquellas derivadas de la combustión.
A pesar del uso generalizado y continuo de los PDPs en la industria del neumático, no hay suficiente conocimiento sobre la contribución de estos aditivos (ACPs) al medio ambiente. Estos compuestos se encuentran en el aire, y son, por lo tanto, una posible fuente de contaminación para la población humana a través de la inhalación. No solo se conoce poco sobre su impacto en términos de salud humana, sino también en cuanto a la biodiversidad y el efecto que puede tener en la fauna acuática después de un evento de lluvia, que arrastra estos compuestos y se filtra en ríos, arroyos y aguas subterráneas y residuales.
El proyecto CIRCULATE (23S06161-001), es impulsado por el CSIC, ISGlobal y Lichen, y es financiado por la convocatoria de Investigación e Innovación 2023 del Ayuntamiento de Barcelona y la Fundación «la Caixa”.